martes, 29 de mayo de 2007

¿Por qué este título para mi blog?

Porque me pareció simpático y remeda el título de una novela cubana, "Memorias de una cubanita que nació con el siglo" de Reneé Méndez Capote, algunos recordarán a esta autora de los libros de lectura de primaria. La verdad, no encontraba qué coño poner y se me ocurrió plagiar este título. Debo aclarar que no es exacto, pues yo emigré en 2001, pero me vale.
Lo del dominio ya es un poco más complicado, agradezcan que no les hago teclear ese título tan largo, (que seguramente estaba libre, ja ja) y escogí uno más corto y fácil de recordar. Y es que mi madre siempre me decía esa frase: músico, poeta y loca, creo que músico es invariable, pero como no quiero que se líen pongo música porque es más fácil de recordar. Y además, yo soy así, un poco de cada cosa y quizás nada. Como dice el refrán "aprendiz de todo, maestra de nada", lo cual por cierto no me quita el sueño, al final lo más importante en este vida es ser feliz, eso me lo enseñó mi amigo Noel.

Hoy quiero dedicar un minuto para hablarles de Margaret, esa amiga increíble que ha fallecido apenas hace un mes. No pretendo entristecerlos, pero creo que se merece un homenaje, mi primer homenaje, puesto que fue una persona excepcional, iluminada. Para que se hagan una idea: tenía al morir 85 años recién cumplidos, y nunca necesitó de nadie, hasta sus últimos momentos se valió por sí misma y no sólo eso, sino que cuidó de Douglas, su marido y única familia, como la excelente enfermera que era, hasta que él murió de cáncer hace ya tres años. Tres años fue lo que duró nuestra amistad, la conocimos cuando Armando atendió a su marido, y al quedarse viuda comenzamos a visitarla. Estaba tan sola y a la vez era tan digna. Así se forjó ese lazo que pasó a ser más que amistad, pues ella fue como una madre para nosotros aquí en Mallorca. No tenía hijos propios y nosotros fuimos como sus nietos adoptivos. Para nosotros digo porque no sólo fuimos Armando y yo los que disfrutamos de su amistad, sino muchos otros: mi padre, Jorge, Julio, Inma, María, Toni, Luisa, Darío, Reydel, Cris, Miky... Todo el que la conocía se admiraba de su elegancia y su jovialidad, no hay que olvidar que tenía 85 años y lo hacía todo en su casa, absolutamente todo. La pasada comida de Navidad la hicimos en su casa, y ella cocinó para los siete que éramos con una cantidad de detalles que creo que los cubanos que estuvimos en su casa nunca habíamos visto nada igual.

Bueno, perdonen que me haya puesto un poco triste, no quiero ni entristecerlos ni entristecerme, que para honrar la memoria de esta amiga no me vale más que la risa, porque ella siempre se estaba riendo, así que celebro la manera tan elegante que tuvo de morir, mientras dormía y que fue un alma de dios, como se dice, dejando todas sus cosas en orden y sin un problema para los demás, como la persona considerada que era.

Margaret, canadiense o escocesa, más canadiense que escocesa y un poco española, a pesar de no atreverse a hablar el español, donde quiera que estés, te mando un beso grande y espero que estés con tu querido Douglas, god bless you, my darling!

1 comentario:

Infortunato Liborio del Campo dijo...

Es inexacto también en otro sentido, la cubanita nació con el siglo, es decir, el siglo XX y ella nacieron juntos, pero en tu caso, el siglo XXI no ha emigrado para ningún lado.

¿Que quieres? A veces descubro un nuevo blog cubano y me pongo a hacer comentarios intrascendentes.